Continuando con la historia de la industria del inodoro portátil, nos encontramos en los primeros pasos de "la era moderna".
La patente del primer inodoro de plástico fue realizada por un hombre llamado George Harding en los Estados Unidos, optando por el polietileno como material de su elección. Su invento tuvo tanto éxito que, incluso hoy en día, muchos de los baños portátiles que encontrarás por todo el mundo siguen estando fabricados con este material.
En la década de 1980, Harding fue responsable de otro importante paso adelante en el desarrollo de baños portátiles: ¡remolques de baño de lujo! En lugar de ser cubículos de ocupación individual, estas cabinas son más espaciosas y pueden acomodar a varios usuarios a la vez. Lo mejor de todo es que contienen una variedad de funciones y complementos sofisticados.
Este tipo de baños son especialmente deseables para eventos de alto nivel como bodas o funciones corporativas. Cuando se combinan con impecables asistentes de mantenimiento y limpieza de inodoros, pueden agregar delicadeza y elegancia a cualquier ocasión o lugar.
Hoy en día, hay todo tipo de diferentes opciones de baños portátiles disponibles para satisfacer diferentes criterios y circunstancias. Estas son solo algunas de las opciones que se ofrecen para quienes organizan un evento o supervisan un proyecto de trabajo:
-Los baños portátiles de fácil acceso pueden acomodar a personas discapacitadas o con requisitos específicos, lo que mejora la inclusión de un evento o lugar.
-Los urinarios para varias personas son perfectos para ocasiones en las que se espera una gran cantidad de hombres.
-Las unidades de asistencia social pueden proporcionar saneamiento adecuado e instalaciones básicas para cocinar a los empleados en un sitio de construcción durante un período prolongado.
Aparte de estas innovaciones, también hay otros avances específicos del sitio en los inodoros, como los destinados a edificios de gran altura que son capaces de colapsarse sobre sí mismos para pasar a través de aberturas estrechas. Otras variedades incluyen inodoros conectados a la red, inodoros de caída larga e inodoros compostables.
Mientras la humanidad continúe congregándose en lugares remotos que no cuentan con plomería interior ni conexiones eléctricas, es probable que haya una demanda de inodoros portátiles. Quién sabe, es posible que aún necesitemos estas instalaciones portátiles mientras exploramos la última frontera y conquistamos nuevos planetas.
Las letrinas extraterrestres probablemente todavía estén un poco lejos, pero no es difícil prever algunos desarrollos que tendrán lugar en el futuro previsible. Una posible alteración es la elección de los materiales que intervienen en la construcción de orinales portátiles. Si bien el polietileno ha tenido un excelente desempeño y hace bien su trabajo, una alternativa que ofrezca juntas removibles o superficies flexibles podría aumentar la movilidad.
Mientras tanto, una conciencia cada vez mayor del impacto ambiental de la raza humana podría significar que los desodorantes químicos tienen una vida útil limitada. Las alternativas orgánicas ya se están volviendo cada vez más comunes en el mundo de los cosméticos y la higiene, por lo que es probable que algo similar suceda también con los inodoros portátiles en un futuro cercano.
Solo falta esperar para ver cómo serán nuestros baños del futuro.